Molinetes

Cuando la eslora de nuestra embarcación tiene una dimensión considerable, el molinete eléctrico pasa de ser un lujo a convertirse en una auténtica necesidad. Con independencia de los tipos de anclas de barcos que encontrarás en el sector náutico, recoger el ancla sin una pieza de apoyo con fuerza eléctrica puede resultar muy cansado, además de llegar a constituir un acto peligroso para nuestra persona.

Disfrutar de nuestros momentos en altamar implica anteponer nuestra seguridad náutica ante cualquier adversidad. Este es el principal motivo por el cual los molinetes eléctricos se han impuesto sobre los manuales, cada vez más en desuso, especialmente si tenemos en cuenta que un gran número de molinetes eléctricos también se pueden utilizar de manera manual.

Los que ya habéis comprado en nuestra tienda náutica sabéis que siempre hacemos un fuerte hincapié en revisar las especialidades de nuestra embarcación para optimizar su vida útil y seleccionar los mejores accesorios para el disfrute de nuestros momentos en altamar. No obstante, estos son algunos aspectos a tener en cuenta para elegir entre los diferentes molinetes eléctricos dentro del sector náutico:

Potencia

La potencia representa la fuerza máxima que puede realizar la pieza, siendo la principal característica a valorar para realizar nuestra compra final. Este debe tener potencia suficiente para levantar al completo la línea de fondeo, compuesta por el peso del ancla del barco más la cadena unida a esta.

Horizontal o vertical

Esta característica de la pieza queda determinada en base a la posición del eje de rotación de la roldana en relación a la cubierta de la embarcación. El espacio existente en la cubierta del barco (O bajo ella) suele ser el criterio principal para decantarnos entre los diferentes modelos que encontraremos dentro del mundo de la náutica.

Longitud de la línea de fondeo

Se considera que la línea de fondeo debe tener una longitud no inferior a cinco veces la eslora de la embarcación. Y este dato, lejos de ser una recomendación náutica, es algo regulado por la Orden FOM /1144/2003, del 28 de Abril, donde se regulan diversos aspectos de seguridad de las embarcaciones de recreo. Así por ejemplo, esta cuestión queda regulada en el artículo 11 de la presente Orden.

Además, la cadena del barco será como mínimo igual a la eslora de la embarcación, exceptuando embarcaciones de menos de 6 metros en los cuales la línea de fondeo se puede constituir enteramente por estacha (Artículo 11.2 de la presente orden.)

A continuación os dejamos la tabla reguladora de los diámetros de cadena y estacha así como el peso del ancla que debe tener tu embarcación en función de la eslora de la misma.